Sant Martí Vell está situado al norte del macizo de las Gavarres. El nombre proviene del patrón de la parroquia: Sant Martí. Este pequeño pueblo, con unos 250 habitantes y una superficie de 17,5 km², tiene un encanto aparte. Es un municipio bastante montañoso, cubierto de bosques de pinares y encinares. Sus callejones con piedras llenas de historia de la edad medieval otorgan al pueblo una personalidad única.
El pueblo disfruta de la tranquilidad de un pequeño valle y la sinuosidad de las Gavarres, esto le ofrece una importante diversidad paisajística con bosques salvajes y con el valle con cultivos mayoritariamente secos.
El santuario de la Mare de Déu dels Àngels, que corona los cerros del municipio y ofrece vistas espléndidas, también forma parte de Sant Martí Vell. Este santuario es uno de los más visitados de la comarca y está situado en la montaña de Puig Alt, además se hacen muchas actividades desde enoturismo hasta cicloturismo. En Sant Martí Vell celebran una Feria de Títeres y un pesebre viviente.
Otro punto a favor de este municipio es que está muy bien comunicado, las dos carreteras principales llevan a Girona, a Madremanya y la Bisbal.